Esta mañana, la Plaza Virgen del Rocío en Almonte se ha convertido en el epicentro de una manifestación juvenil contra la Violencia de Género. Cerca de 600 estudiantes de los centros educativos participaron en la quinta edición de esta marcha escolar. Una iniciativa que no sólo busca concienciar sobre esta triste realidad, sino también inspirar a las generaciones futuras a ser agentes de cambio.

La concejala de Servicios Sociales, Ana Saavedra, ha compartido con los participantes la importancia de la concienciación, destacando el papel fundamental de la juventud en la construcción de una sociedad libre de violencia y equitativa. "Debemos ser ejemplos de lucha, compromiso y solidaridad", ha subrayado, instando a los jóvenes a liderar un futuro sin violencia ni discriminación. En la misma línea ha intervenido la concejala de Educación y Juventud, Pepa Faraco.

A continuación, dos estudiantes de los institutos IES Doñana e IES La Ribera, leyeron un manifiesto enérgico y comprometido. "Rechazamos rotundamente cualquier forma de violencia, discriminación o desigualdad", declararon, enfatizando su compromiso de construir un entorno donde prevalezca el respeto y la empatía.

El punto de partida, frente al edificio del Ayuntamiento de Almonte, ha marcado el inicio de esta marcha que ha recorrido las calles del centro almonteño. Los jóvenes, portando dorsales impresos con el número de atención a mujeres, el 016, así como globos violetas y pancartas, enviaron un claro mensaje: la unión contra la violencia de género.

El acto ha contado con la participación de las asociaciones de mujeres de Almonte, El Rocío y Matalascañas, a quienes Saavedra ha agradecido su incansable labor. Destacando el compromiso de la comunidad educativa, por su colaboración constante en iniciativas de concienciación.

La marcha ha culminado en la Plaza Virgen del Rocío, donde alumnos del IES La Ribera han interpretado la canción "Se acabó" de María Jiménez, convertida en un himno contra la violencia de género y lema inspirador de la campaña local: "Se acabó. Mi mundo es otro". Para cerrar la jornada, se ha guardado un minuto de silencio en memoria de las víctimas de violencia de género.

Este acto es parte de un extenso programa de actividades desarrollado por el Ayuntamiento de Almonte durante todo el mes de noviembre, en colaboración con el Centro de Información a la Mujer, con el objetivo de erradicar la violencia de género y fomentar la igualdad en la sociedad.