A pesar de haberse alcanzado un acuerdo técnico con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y de haberse aprobado el texto inicial en sesión plenaria, el proyecto ha quedado bloqueado tras la intervención del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que ha remitido recientemente un nuevo convenio ya firmado, con condiciones que no responden a lo pactado inicialmente.

Con el objetivo de obtener explicaciones claras y buscar vías de avance, el alcalde de Almonte, Francisco Bella, y la primera teniente de alcalde, Antonia Rocío Pérez, han mantenido esta mañana una reunión en Sevilla con la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Gloria Martín. El encuentro ha permitido repasar el recorrido de la propuesta técnica consensuada y analizar las consecuencias de este cambio de criterio por parte del Ministerio.

El proyecto tenía como finalidad reorganizar la batería de sondeos de Matalascañas para mejorar la eficiencia en la captación de agua, evitar pérdidas y reducir la presión sobre el acuífero del entorno de Doñana. Una actuación planteada como obra de interés general y considerada estratégica tanto para la sostenibilidad ambiental como para el abastecimiento del núcleo costero.

Tras varios meses de trabajo conjunto y tras haberse alcanzado un acuerdo que contaba con respaldo técnico y jurídico, la recepción de un nuevo texto, con modificaciones sustanciales y ya firmado por el Ministerio, ha generado malestar en el seno del equipo de gobierno local, que considera que este cambio de rumbo no ha sido consensuado ni responde a las necesidades reales de la urbanización.

“El Ayuntamiento ha cumplido con su parte. Hemos negociado, aprobado el convenio en Pleno y defendido una actuación razonable y urgente. Lo que ha llegado después no es lo que acordamos. Si se ha negociado por encima de las posibilidades del Ministerio, eso no puede trasladarse ahora como una responsabilidad de este Ayuntamiento, ni comprometer una solución urgente a los problemas de abastecimiento”, ha señalado el primer edil.

Desde el Ayuntamiento se recuerda también que, en paralelo, el Consistorio presentó ante el Ministerio diversos proyectos destinados a mejorar la eficiencia hídrica en Matalascañas, con los que se estimaba un ahorro superior a un hectómetro cúbico de agua al año. A pesar del impacto positivo que estas actuaciones tendrían sobre el consumo y sobre la sostenibilidad del acuífero, no fueron finalmente subvencionadas por el Miteco, “que optó por priorizar iniciativas de otros municipios”, apuntan.

El gobierno local mantiene su disposición al diálogo institucional, pero reclama seriedad en la interlocución y exige que cualquier avance respete los términos pactados. El objetivo, insisten, sigue siendo el mismo: garantizar un abastecimiento hídrico sostenible, eficiente y compatible con la protección del medio ambiente.